El ex seleccionado Percival Piggott asumió ayer como entrenador del Sporting San Miguelito, con la idea de devolverle la sonrisa a un equipo que armó un plantel para ser protagonista, pero que de momento parece tirar más para abajo que para arriba.
El equipo de San Miguelito recién ganó el pasado fin de semana por goleada 4-0 al Atlético Veragüense, después de ocho jornadas sin conocer la victoria.
Precisamente, su último triunfo había sido con el mismo equipo interiorano en el Toco Castillo, por 1-0.
La mala racha produjo que el técnico español Fernando García Ramos se desilusionara, por lo que presentó su renuncia del equipo.
Hoy, con Percival Piggott, el Sporting espera remar hacia las semifinales, donde el camino se presenta espinoso.
Atlético Chiriquí, San Francisco, Chorrillo y Árabe Unido comandan la tabla con 24, 23, 22 y 21 puntos, respectivamente.
Le siguen empatados con 17 unidades: Alianza, Sporting, Chepo y Veragüense.
El ex jugador nacional se estrena prácticamente en la primera división como entrenador en una situación incómoda, donde espera convertirse en el salvador de un equipo que estuvo líder en la quinta jornada, en la que había ganado su último partido antes de hacerlo el pasado fin de semana.
Cuatro empates y cuatro derrotas fueron el palmarés en las pasadas ocho fechas, ahora con Percival Piggot, Sporting quemará sus últimos cartuchos.
