Meg Whitman, que se contrató como máxima responsable de Hewlett-Packard Co. hace casi dos años para reanimar la compañía fabricante de computadoras de Silicon Valley, había dicho que los ingresos crecerían el año próximo conforme se estabilizaran las ventas de computadoras personales.

Pero ayer abandonó ese pronóstico.

La declinación de las ventas de PC se extiende más de lo que Whitman preveía, hay una débil demanda de servicios y hardware empresarial, y Dell Inc. y otras competidoras le restan ventas con una enérgica política de precios.

La reducción de costos también llega a su límite con la decisión de eliminar 29 mil empleos. Whitman sigue enfrentando obstáculos luego de tres años de pérdidas, inquietud administrativa, cambios de estrategia y desaceleración del crecimiento.

“Hay claros indicios de que el 80% de su negocio enfrentará escollos en el año fiscal 2014. Me refiero a PC, impresoras y servicios”, dijo Abhey Lamba, un analista de Mizuho Securities USA Inc. que pronostica que las acciones tendrán un desempeño inferior al promedio, lo que equivale a recomendar su venta.

Whitman entró en funciones en 2011, cuando pidió paciencia a los inversores y redujo las estimaciones de crecimiento de su predecesor, que eran demasiado optimistas en su opinión. Las acciones habían subido 78% este año ante indicios de que podría haber una recuperación en marcha.

Los resultados del tercer trimestre fiscal mostraron una declinación de los ingresos en la mayor parte de las actividades de Hewlett-Packard, y los pronósticos de la compañía para el período hasta octubre estuvieron por debajo de las estimaciones de algunos analistas.